Sapag intransigente
La reforma a la Ley de Hidrocarburos que impulsa el Gobierno colocó a los gobernadores de cuatro provincias petroleras en la vereda opuesta. Previsiblemente, los mandatarios de Neuquén, Chubut, Mendoza y Río Negro rechazaron la iniciativa. Y la Casa Rosada respondió dejándolos afuera de una reunión en la que convocó suscribir un acuerdo para refinanciar las deudas de las provincias con la Nación.
El gobernador de Neuquén, Jorge Sapag, admitió que hay «tensión» con el gobierno nacional en torno a la nueva ley de hidrocarburos y reiteró que si no se logra un consenso entre las provincias y la Nación el «único lugar» para debatir el proyecto «es el Congreso».
No obstante, advirtió que 10 de los 40 artículos que lo componen, rozan lo inconstitucional. «Confío en que el Ejecutivo haga algunas correcciones y que el Senado defienda los derechos de las provincias. No es una postura caprichos: nos asisten la Constitución y el derecho», dijo Sapag.
«Obviamente que la pretensión de YPF y Nación de generar una ley de acuerdo a las convicciones que tiene el actual directorio de YPF genera una tensión. Hay una tensión y hay puntos de fricción que, por lo menos por el momento, no hay ruptura entre las autoridades de YPF y las provincias. No sólo es Neuquén sino Mendoza, Chubut, Río Negro y Tierra del Fuego», señaló.
En una entrevista con el diario Río Negro, Sapag dijo que el segundo borrador del proyecto nacional «probablemente lo tengan los legisladores del oficialismo» pero aclaró que «no es un proyecto». «Hicimos otro borrador artículo por artículo y ya cuentan con nuestro pensamiento» comentó Sapag, quien reconoció que «ya parece todo muy tedioso» pero añadió que él está «siempre atento y abierto al diálogo».