Tokio 2020: medallas reciclables y robots en las tribunas

Las medallas de Tokio 2020 fueron realizadas con computadoras, cámaras y celulares en desuso. En las tribunas habrá robots animadores. El futuro ya llegó.

«El futuro llegó, hace rato», entonaba el Indio Solari por el año 1998, cuando en la cabeza de unos pocos podía imaginarse que los robots iban a reemplazar al público en las gradas de un escenario de Juegos Olímpicos y que las medallas de los mismos iban a estar realizadas con chatarra reciclada de elemtos tecnológicos que la población japonesa ya no utiliza cómo laptops, cámaras digitales y teléfonos celulares. Tokio 2020 viene a mostrarle al mundo algo de lo que se viene en la nueva modernidad en el primer mundo.

El lema de la campaña que impulsó está construcción de las medallas fue: «Hacia un futuro innovador para todos» y a través de la sustentabilidad es que se desarrollaron las medallas de primer, segundo y tercer lugar para Tokio 2020. Pero claro, las medallas recicladas sólo serán una pequeña muestra de desarrollo tecnológico, ya que los robots asombrarán a millones.

Juegos Olímpicos: las medallas reciclables de Tokio 2020-

¿Quién diseñó las medallas reciclables de Tokio 2020?

Las preseas que sorprenden al Mundo fueron ideadas por el japonés Junichi Kawanishi, que se impusó en una competencia que involucraba a 400 contendientes. La recolección se gestó desde las redes y desde la página oficial de los Juegos Olímpicos y fue un sueño que comenzó en abril de 2017, terminó el 31 de marzo de 2019 y se transformó en realidad este año. Vale destacar que esta no es la primera vez que se utiliza basura tecnológica para la creación de estos galardones. El único antecedente son los Juegos de Invierno Vancouver 2010.

¿Quiénes son Pepper y Spots, los robots que harán de público en los Juegos Olímpicos de Tokio 2020?

Si algo va a impactar a deportistas y fanáticos será la presencia de los robots en las tribuas de Tokio 2020. La idea de acumular pantallas para que la gente pueda conectarse a los eventos desde sus pantallas de celulares y computadoras tendrá además la presencia de un viejo proyecto futurista. Su nombre es Pepper y fue bautizado cómo el «robot emocional» cuando el mundo lo conoció un año atrás.

Los robots Pepper y Spot estarán en las tribunas haciendo las veces de público ante las restricciones del coronavirus. Pepper fue presentado el año pasado en sociedad como una herramienta vital para el futuro y de hecho su efecto fue tan grande que los primeros mil se vendieron en menos de un minuto. Sin embargo, su producción se frenó luego de que la agencia Reuters diera a conocer que Pepper había tenido a acceso a documentación relacionada con recortes de personal. La idea de tenrlo como personal en megaempresas quedó en la nada y hoy tiene «nuevo trabajo».