Venezuela: menos de la mitad del padrón votó en elección Constituyente
El Gobierno de Venezuela instalará en las próximas horas una controvertida asamblea constituyente, que reescribirá la carta magna, a pesar del masivo rechazo en casa y la condena de gobiernos de América y Europa.
A través de una elección con una participación que según la autoridad electoral superó el 41% del padrón, pero para la oposición no fue mayor al 12%, quedó formada la Asamblea Nacional Constituyente, que entrará en funciones en la semana.
Ocho millones de venezolanos participaron en la elección que se dio en medio de protestas y un espiral de violencia. Este escenario presagia tiempos difíciles para el presidente Nicolás Maduro, que deberá llevar adelante la reforma de la constitución entre una creciente presión local e internacional.
La presidente del Consejo Nacional Electoral (CNE), Tibisay Lucena, anunció que «8,089.320 de venezolanos» participaron el domingo en la consulta para elegir a los 545 delegados de la Asamblea Constituyente, que se instalará esta semana para iniciar el proceso de reescribir la Constitución. Unos 19,4 millones de venezolanos estaban habilitados para votar, pero participó el 41,53% del padrón electoral, precisó Lucena.
Entre los candidatos electos figuran la primera dama, Cilia Flores; el vicepresidente del partido oficialista, diputado Diosdado Cabello; la excanciller Delcy Rodríguez; la exministra Iris Varela, sancionada recientemente por Estados Unidos; el ex vicepresidente Aristóbulo Istúriz; el exgobernador del estado Carabobo, Francisco Ameliach, y la exministra Carmen Meléndez.
La consulta se realizó sin la participación de la coalición opositora, que consideró el proceso como un «fraude constitucional» y llamó a protestas esta semana en rechazo a la instalación de la Asamblea Constituyente.
Los resultados sobre la participación fueron cuestionados de antemano por algunos dirigentes de la coalición opositora, quienes durante la jornada informaron de una significativa abstención y aseguraron que sólo unos tres millones de electores intervinieron en el proceso.
«Si no fuera una tragedia…y no significara más crisis, casi que daría risa esa cifra del CNE», dijo en su cuenta de Twitter el vicepresidente de la Asamblea Nacional, diputado Freddy Guevara, al cuestionar el anuncio de la autoridad electoral.
«Hemos dado una batalla para abrir una compuerta», dijo el presidente, Nicolás Maduro, durante una concentración en la histórica Plaza Bolívar, en el centro de la capital. El mandatario celebró las cifras de participación, afirmando que los comicios se realizaron «casi bajo una guerra«. «Lo que hemos visto hoy es admirable«, afirmó Maduro al asegurar que la participación fue la «más grande que haya sacado la revolución bolivariana» en 18 años.
El gobernante desestimó las amenazas de posibles sanciones económicas que hizo Washington de avanzarse con la Asamblea Constituyente, y sostuvo que a «Venezuela no la ordena ni la mandan desde el exterior».
Al hablar de las primeras tareas que tendrá la Asamblea Constituyente, Maduro dijo que la Fiscalía General habrá que «reestructurarla de inmediato y declararla en emergencia y tomar el mando para que haya justicia». La fiscal general, Luisa Ortega Díaz, que por años fue vinculada al oficialismo, inició hace cuatro meses un enfrentamiento contra el gobierno de Maduro y su iniciativa de reforma de la Constitución.
Asimismo, el gobernante planteó que habrá que revisar la inmunidad de algunos funcionarios y dijo que es posible que algunas de las personas que ha promovido la violencia de los últimos meses «terminarán en una celda».
El presidente de la encuestadora local Datanálisis, Luis Vicente León, afirmó que el discurso de Maduro anuncia una «radicalización total» del oficialismo, y «pulveriza» la posibilidad de acuerdos que rescaten el equilibrio. Todo indica que el gobierno «aumentará su acción represiva» para reducir los «riesgos internos», dijo León en un mensaje de su cuenta de Twitter.
La Fiscalía General confirmó el domingo la muerte de diez personas (la oposición habló de 16) e informó que durante la jornada electoral fueron detenidas 58 personas, 19 por delitos electorales y 39 por manifestaciones.
Ronald Ramírez Rosales, guardia nacional que recibió un disparo en el estado del Táchira; Ángelo Méndez, de 28 años, y Eduardo Olave, de 39, tras ser heridos con armas de fuego en el estado occidental de Mérida; Luis Zambrano, de 43 años, quien falleció a consecuencia de un disparo en la cabeza en la ciudad occidental de Barquisimeto, estado Lara; Ricardo Campos, opositor de 30 años que fue víctima de un tiro cuando dos policías dispararon contra una barricada en el estado oriental de Sucre, y dos adolescentes del Táchira, de 17 y 13 años.
Asimismo, el jefe de Comando Estratégico Operacional de la fuerza armada, almirante Remigio Ceballos, anunció que un sargento de la Guardia Nacional murió tras un ataque con dos granadas que realizaron a un centro de votación de la población central de Valle la Pascua, estado Guárico.
Con estas muertes se eleva al menos a 125 la cifra global de fallecidos como producto de las manifestaciones desde hace 120 días y que han dejado casi 2.000 heridos y más de 500 detenidos.
Pese a las presiones internas y los llamados que hicieron varios países, entre ellos Estados Unidos, que abrió la posibilidad de aplicar sanciones económicas, Maduro siguió adelante con la iniciativa. Los gobiernos de Argentina, Perú y Brasil se sumaron el domingo a la posición que habían expresado días atrás Colombia, México y Panamá contra el proceso de reforma de la constitución.
León expresó que la postura asumida por el gobierno de Maduro hace inevitable la aplicación de sanciones económicas unilaterales contra Venezuela, y sostuvo que eso será «demoledor» para la economía, que se encuentra sumida en una crisis.