La izquierda española ha logrado imponerse por amplio margen al bloque de la derecha.
El Partido Socialista Obrero Español (PSOE) se impone en las elecciones generales realizadas este domingo en España. Con casi el 100% de los votos escrutados, Pedro Sánchez, actualmente presidente interino del país, es elegido por el 29% de los votos como próximo mandatario.
En segundo lugar, con muchos menos sufragios de los que se esperaban, quedó Pablo Casado, del conservador Partido Popular (PP), quien obtiene el 16,8%. siendo la peor derrota del partido en su historia. Tercero quedó la considerada «segunda marca» del PP, Ciudadanos, con el 15,8%. En cuarto lugar, lejos de sus mejores años, Unidas Podemos llega al 12, según informó el ElDiario.es
Por su parte, el ultraderechista Vox araña el 10% de los sufragios y termina siendo decisivo para la derrota del PP, ya que logró captar al electorado más reaccionario del hasta hace poco partido de gobierno.
Según los primeros análisis, los comicios dejaron expuesta la fragmentación de la derecha, que muestra a un PP con una herida abierta de la que bebió Ciudadanos y, sobre todo, Vox, que parece haber reclutado a los votantes más reaccionarios del histórico espacio conservador español.
Asimismo, Podemos, hoy rebautizado como Unidas Podemos, aunque aún con el liderazgo de Pablo Iglesias, retrocede con fuerza, pasando de 71 bancas a 42. Se espera que los acuerdos con los socialistas le alcancen al ratificado gobierno de Sánchez para trabajar en conjunto con los 122 diputados que ubicó en el Parlamento.
En cuanto a legisladores de la derecha, el Partido Popular perdió casi la mitad de lo que tenía y Ciudadanos llegó hasta los 57, a solo 10 de los del PP. Vox, en esa zona ideológica, consiguió nada menos que 24 diputados, para un Congreso que, más allá de la victoria del PSOE, tiene más componente franquista que antes.
En relación a los independentistas catalanes, ERC eligió 15 diputados -tres más de los que consiguieron en 2016- y Junts per Catalunya baja a 7 frente a los 8 que tuvo la extinta Convergencia Democràtica de Catalunya. En Euskadi, el PNV consigue 6 escaños, uno más de los que tenían hasta ahora, y EH Bildu se lleva 5. Coalición Canaria obtiene dos escaños.
