Los Pumas: Un día de relax

Los Pumas iniciaron este lunes la que puede ser su semana más tranquila en la Copa del Mundo de Rugby. Con la clasificación a cuartos al alcance de la mano y seis días hasta el próximo compromiso, el plantel argentino disfrutó de un día de descanso y recuperación.La consigna, eso sí, es clara en la concentración albiceleste: un día de relax para no relajarse.

Namibia, el equipo más débil del Grupo C, será el último rival de la fase inicial, el domingo a las 8 en Leicester. Los Pumas seguramente habrán asegurado su pase a cuartos el viernes, si Tonga no le gana a Nueva Zelanda –una posibilidad que, más que batacazo, sería un milagro.

Prensa UAR

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Por eso después de los festejos en familia del domingo en Welford Road, el seleccionado tuvo una jornada de trabajo regenerativo en pileta como única actividad, más allá de que varios integrantes del plantel visitaron la sala de kinesiología para tratarse distintas molestias, normales del día después de un partido de este nivel.

Quienes sí tuvieron un día de alta intensidad fueron los integrantes del staff de entrenadores, que estuvieron reunidos en uno de los salones de St. Geroge´s Park analizando los errores y virtudes del partido ante Tonga, para luego definir el trabajo de la semana y los lineamientos de cara al próximo partido frente a Namibia.

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Aun cuando los All Blacks pudieran perder con Tonga, a Los Pumas les alcanzaría con sumar un punto (apoyar al menos cuatro tries o perder por 7 puntos o menos de diferencia) para asegurarse la segunda plaza en cuartos.

Pero Raúl Pérez, uno de los entrenadores del Seleccionado Mayor, dejó en claro el espíritu: “Está bueno que siempre tengamos algo para corregir porque significa que seguimos evolucionando. La madurez del equipo pasará por no relajarse y afrontar el próximo partido con la misma intensidad que los anteriores. Debemos pensar en nuestra propuesta y creo que la competencia que tenemos en la semana, la cual hace que cada uno lo tome como una oportunidad para ganarse un lugar, es lo que nos hace no medir al rival y jugar para confirmar cada uno su momento.”