Desalojados acampan en la calle

Después de que la Policía Metropolitana, Gendarmería y la Policía Federal desalojaran a las 700 familias que vivían en la Villa Papa Francisco en Villa Lugano, unas 60 personas continúan acampando en las cercanías del terreno liberado.

El acampe es un asentamiento improvisado frente a dónde ahora sólo hay restos de viviendas, en Avenida Fernández de la Cruz, entre Escalada y Pola.

«Éste es mi barrio y acá me voy a quedar. Los refugios sólo sirven para dormir una noche o dos, pero después te echan», explicó Pedro Ramírez, uno de los vecinos que vio cómo destruían su casa las topadoras.

El gobierno de la Ciudad informó que los vecinos tuvieron la oportunidad de ir a refugios o de entregar sus pertenencias para que sean guardadas en un depósito.

«Nos acercamos tres veces, sobre todo cuando se largó a llover, para ofrecerles la posibilidad de ser trasladados, de ir a un refugio o para que dejaran sus cosas en un depósito, pero se negaron. Ahora será la jueza quien deberá determinar cómo seguir», dijo al diario La Nación la vicejefe de gobierno, María Eugenia Vidal.

Los vecinos contradicen la versión oficial. Una mujer que vivía en el barrio dijo: «No pudimos sacar nuestras cosas del terreno. Mi heladera quedó aplastada por las topadoras». En tanto que otra agregó: «Los de la villa 20 se llevaron mi televisor».

En el lugar aún está la Policía para evitar que la gente vuelva a ingresar al predio desalojado.